Gabriel Mato resalta el Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono para reducir las emisiones a nivel mundial

El eurodiputado del Partido Popular Gabriel Mato ha destacado este lunes, durante su intervención en la Comisión de Comercio Internacional del Parlamento Europeo, la importancia del Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono como “solución positiva e innovadora para incentivar las reducciones en las emisiones mundiales”.

Gabriel Mato resalta el Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono para reducir las emisiones a nivel mundial
El eurodiputado insiste en que “se debe evitar que las importaciones puedan eludir su aplicación mediante el tránsito por terceros países”

Este nuevo mecanismo permite que determinados productos importados por la UE sean sometidos a un gravamen equivalente al de los derechos de emisión. Pero, para Mato, este instrumento “solo será útil si se define y aplica de manera eficaz”, a la vez que ha dejado claro que “nuestras empresas, nuestras pymes y nuestra industria son actores imprescindibles en esta transición energética y ecológica en la que estamos inmersos, y no pueden perder competitividad”.

Además, el eurodiputado ha puntualizado la necesidad de que este Mecanismo incluya, progresivamente, a “un mayor número de sectores, productos y subproductos para evitar problemas y distorsiones en el mercado interior”. Asimismo, ha señalado que dicho instrumento debe “reflejar el nivel real de las emisiones de los bienes importados, incluidas las emisiones indirectas”, además de contar con “elementos para evitar que las importaciones puedan eludir la aplicación del Mecanismo mediante el tránsito por terceros países distintos al de origen”.

Gabriel Mato también ha hecho un llamamiento para que las industrias europeas exportadoras “disfruten de condiciones de competencia equitativas, introduciendo algún tipo de bonificación compensatoria o incentivos a la exportación”.

El Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono se utilizará inicialmente a los sectores del acero, aluminio, cemento, fertilizantes y electricidad, y se irá introduciendo de manera progresiva. Así, se aplicará parcialmente a partir del 1 de enero de 2023, mientras que en 2026 ya se llevará a cabo totalmente. Durante la fase introductoria, solo será obligatorio para las empresas declarar los bienes importados y la emisión de CO2 asociada.

En la actualidad, los sectores de la aviación, la industria y la producción de energía de la UE están sometidos al sistema de comercio de derechos de emisión, por lo que cuentan con unos costes por emisiones de CO2 que no tienen las empresas de esos mismos sectores situadas fuera de la UE. Por ello, el doble objetivo de esta propuesta se basa en salvar esta diferencia e impulsar a otros países a adoptar modelos parecidos al sistema de la UE de comercio de emisiones.

En este sentido, el diseño propuesto por la Comisión afectaría a países como Rusia, China, Turquía, Argelia o Marruecos. En el caso de Turquía la afección principal sería el sector del cemento, en clara competencia con las industrias españolas, mientas que, en relación con Marruecos y Argelia, serían sus exportaciones de fertilizantes.